No es querer ser adivino, tan solo son sensaciones. Tras los 15 días de campaña electoral, los sondeos y encuestas, la pandemia que haría que cualquier persona tuviera temor a contagiarse y más si es un sitio concurrido, y además un día de esos llamados de perros con lluvia, aire y frío en toda Cataluña. Con todo eso, la sensación es que mañana tras los resultados de esta noche los partidos nacionalistas catalanes dejarán a un lado sus fuertes discusiones de los últimos meses alzando la bandera del miedo al fascismo.
Tengo la impresión, por los muchos mensajes que veo a los partidos llamados constitucionalistas que sus votantes se han quedado en casa, incluidos los del PSC. Aunque evidentemente aún queda mucha tarde y podría darse un vuelvo importante a la participación. Hay que recordar que se recomendaba que entre las 9 y las 12 de la mañana fueran las personas más vulnerables en esta pandemia, es decir, personas mayores, enfermos, etc… Entonces les queda la esperanza a los partidos constitucionalistas que se movilice su electorado. Pero ya digo, veo mucho nerviosismo en las redes sociales pidiendo participación, que nadie se quede en casa, incluso algunos subidos de tonos en plan “si no venís a votar luego no os quejéis cuatro años”. Preocupante.
Y como decía incluidos los del PSC. Dependerá de si vuelven a recuperar de nuevo el cinturón rojo de Barcelona, que en las pasadas elecciones se tiñó de naranja. Pero creo que los de Illa y Carrizosa sus votantes serán de los que menos se van a movilizar. Bueno, incluido los del Partido Popular catalán que me da el pálpito que se quedan sin entrar en el Parlament.
¿Y quien va a ganar? Pues los partidos nacionalistas que tienen más movilizados a sus fieles seguidores. Esos no van a fallar a las urnas. Al igual que tampoco lo harán los votantes de VOX que irán todos sin excepción a votar.
Así que la imagen me temo será esa. Los partidos nacionalistas uniéndose con la excusa del auge del fascismo en Cataluña, que hay que luchar contra los fascistas, y todo ese tipo de mensajes. Mientras los constitucionalistas deberán recapacitar, incluidos el PSC que tenía mucho interés en tener elecciones en plena tercera ola de la pandemia, sobre el futuro de estos partidos en Cataluña.
Lo peor sin duda es que esto se trasladará a la política nacional, con un VOX más fuerte cada día, un PP que verá frenado su ascenso nacional y un PSOE que empezará a ver que la estrategia, que el plan de estar gobernando hasta 2030 igual empieza a tambalearse.
Y ahora es cuando más de uno empieza a temer aquello del peligro de alimentar a los monstruos, al final acaban devorándote. Aunque como digo, es una sensación. Habrá que esperar hasta esta noche a ver que ocurre.
